viernes, 18 de septiembre de 2009

DE BARCOS Y BRUJAS

Estos días atrás, con veleros de gran porte adornando nuestra bahía querida de Santander, me han animado a pasear por las páginas de este maravilloso y diabólico invento Gateniano de la Red, y he descubierto cosas que me atrevo a compartir.

Una de las naves que nos ha visitado, la que más ha llamado mi atención, ha sido la reproducción fiel de la nave Victoria, la primera que dio la vuelta al mundo, devolviendo al vasco (nuestro vasco) Juan Sebastián Elcano al puerto de Sanlúcar en septiembre de 1522.

Animado a profundizar en esa "aventura", quise saber más sobre el asunto, ya que en el colegio nos contaban eso del viaje Magallanes-Elcano, y parecía como esos tandem famosos de zipi-zape o Mortadelo-Filemón o Hanna-Barbera.

Resulta que los españoles buscaban, a cualquier precio, llegar a las indias donde podían aprovisionarse de especias tan preciadas, porque los portugueses ya controlaban el camino rodeando Africa.

Como Colón lo intentó, pero se topó con el continente americano, cuando se dieron cuenta de que no era lo que inicialmente creían, pues hubo que rodearlo también (al estilo portugués con Africa).

El rey, ya viudo, Fernando el Católico, encargó una expedición en 1516, pero sólo llegó a Brasil, ya que los nativos mataron a su capitán, y las dos naves regresaron a España por donde habían ido.

El segundo, y famoso, intento lo capitaneaba curiosamente un portugués, Magallanes, pese a que la expedición la promovió y financió el rey español.

en septiembre de 1519 cinco naves con 265 hombres salían del puerto de San Lucar de Barrameda (previa obligada salida de Sevilla) con Magallanes capitaneando la expedición y además capitán de la nave TRINIDAD.

Las otras cuatro naves eran: SAN ANTONIO, CONCEPCION, SANTIAGO y VICTORIA

La verdad es que no era fácil conseguir tripulación para este tipo de viajes "a lo desconocido" .

El marino vasco Juan Sebastián se enroló como maestre (lo equivalente a segundo de abordo ) en la Concepción.

Os animo a conocer más de este fantástico viaje, que duró 4 años y del que sólo regresó una nave, LA VICTORIA, capitaneada por Elcano, y con sólo 17 hombres, de los 265 que partieron.

A su llegada, el rey Carlos I (o Carlos V según se quiera) le concede el privilegio de que en su escudo familiar pueda leerse la leyenda: "el primero en rodear la tierra".

Moriría el vasco en posterior viaje al las mismas islas del Pacífico, ricas en especies, que visitó en este primer famoso viaje.

¿y las brujas? os preguntareis.

Pues la cosa viene de barcos también, en este caso de un famoso velero llamado Cutty Sark, que da nombre al wisky y a la más famosa regata de veleros.

Resulta que allá por finales del siglo XIX, eran famosas las carreras del té.

Se traía té desde Shangai a Londres (via Africa) y un inglés decidió fabricar un veloz barco (o clipper) que fuese el nuevo lider en esa famosa carrera. Así en 1869 se bota a la mar este barco, y gana la carrera desde Shangai a Londres, llegando a alcanzar los 20 nudos (millas por hora).

Poco después se abrió el canal de Suez por los ingleses, y claro, sólo los barcos a vapor podían atravesarle, lo que condujo a los veleros a no ser rentables para esos viajes.

Hoy en día se puede visitar, amarrado al puerto de Greenwich donde sirvió años como buque escuela, tan famoso clipper.

¿y las brujas? pues la cosa va de poema.

Resulta que hay un poema escocés que se llama "Tam O`Shanter" y que cuenta que el bueno de Tam, (que era granjero, y supongo que escocés), pues se agarraba unas buenas cogorzas los fines de semana en algún pub de esos, y claro, luego le tocaba volver a casa trotando sobre su yegua, que se llamaba Maggie (como la esposa del de Falcon Crest).

Y viniendo Tam en ese estado, una noche lluviosa, pasó delante de una iglesia, y vio a un grupo de brujas danzando y cantando.... (esto es muy recurrente, nunca se cuenta que estén las brujas haciendo punto de cruz, por ejemplo).

Entre ellas, todas feas y con berrugas en a nariz (supongo) había una muy guapa, que se llamaba Nannie, y que llevaba puesto sólamente un "cutty sark".

Bien, pues resulta que el cutty sark es una especie de blusa muy corta y de vivos colores.

Llegados a este punto del poema, yo me pregunté al leerlo, que la tal Nannie tenía que estar mazo buenorra, para poder ir por ahí, en plan bruja años sesenta, minifaldera y eso.

Pues Tam, a pesar de la cogorza, se da cuenta de la movida, y claro, arranca a galopar para atravesar cuanto antes el puente que cruzaba el rio del pueblo, porque es sabido por todos... ja, que las brujas no pueden atravesar cauces de agua.

Pero resulta que la buenorra de Nannie, con su cutty sark, consigue agarrarse a la cola de la pobre yegua Maggie, y digo pobre porque el poema narra que le llega a arrancar un puñado de pelos de la cola.

Aunque el poema pueda parecer algo surrealista, os prometo que es verdad, y para comprobarlo no hay más que visitar Greenwich (yo pienso hacerlo en el next viaje a Londres) y vereis que en el mascarón de proa está la bella Nannie, con su brazo izquierdo alargado, como cogiendo la cola de la yegua Maggie.

Por último deciros que los marinos de la época, que iban en la Cutty Sark, colocaban pelos de esparto en la mano de la figura de la bruja, simulando los pelos de la pobre Maggie.

Unos cachondos, los marineros del siglo diecinueve.

Cachondos..., y amigos de la poesía.

hasta otra