viernes, 29 de octubre de 2010

ETAPAS

Puede parecer obvio, pero vivimos etapas a lo largo de nuestra vida.

Etapas que vamos pasando, sin apenas darnos cuenta, y que necesariamente marcan nuestra manera de ser y de actuar.

Llevo días clasificando viejas fotos, algunas con más de 30 años y otras más recientes, de apenas 5 o 10 años....

Quizás por eso me ha venido a la cabeza esto de las Etapas.

Es muy pretencioso hacer patrones universales sobre los pasos que todos hemos de dar a lo largo de este paseo terrenal, pero lo cierto es que, con matices nada importantes, casi todos cruzamos los mismos rios.

La PRIMERA etapa, dicen los expertos que es transcendental para la formación de nuestra personalidad. Yo la llevaría hasta la edad en la que tenemos consciencia de que existe un "afuera, más allá de nuestro entorno familiar". Quizás el comienzo del colegio pueda ser ese momento de paso a una SEGUNDA etapa, cuando lo que pensemos será tan importante como la manera en que nos expresemos y actuemos frente al grupo, a los demás. Esta segunda etapa, normalmente identificada con la niñez, es del colegio y la casa, los dos espacios que ocuparán todo nuestro vivir.

La TERCERA etapa es cuando la hormona se revoluciona. Es una etapa larga, porque yo la prolongo (para eso soy el padre intelectual de esta teoría mía) hasta el momento de comenzar el noviazgo "serio" (entiéndase el noviazgo que culminará en boda o equivalente). por descontado que de cada una de ellas podríamos extendernos hasta escribir un libro...pero se trata ahora sólamente de establecer un criterio.

La CUARTA etapa es ese proceso a caballo entre la vida social y la vida en exclusiva, con la persona con la que quieres andar el resto del camino, esta etapa me atrevo a llevarla más allá del momento del casamiento, ya que la considero hasta que llega el primer hijo (o hija, claro)

Es la quinta etapa, esa en la que hay que aprenderlo todo (como en casi todas las anteriores, :-) )) y donde esa vida social queda mermada a la mínima expresión, para centrar las energías en el que acaba de llegar.

La QUINTA es quizás la etapa más larga, depende del número de hijos que se lleguen a tener, pero terminará en el momento en que al menor de todos esos hijos se le entrega una copia de la llave de casa.

En ese momento nos adentraremos en la SEXTA etapa, en la que se recobra parte de ese tiempo casi olvidado, en el que había otra vida (social) tras la puerta de casa. A partir de aquí hablo de pura intuición, claro, pero voy a atreverme a terminar...

Esa sexta será una gran etapa, donde los hijos seguirán creciendo en protagonismo, pero de forma diferente, más adulta... la casa se llenará de personas que compartirán muchas cosas. Es una etapa larga, ya que

La SEPTIMA es la etapa que comienza el día que el primero de los hijos se va de casa (por estudios, trabajo o por lo que sea) regresará ....pero será ya de forma puntual, a ratos,.... ya no será igual. Esta etapa será larga o corta según (otra vez) el número de hijos,ya que termina en el momento en que el último de los hijos se va.

Y llega la OCTAVA, que puede haberla o no, ya que es el periodo de transición a la NOVENA y última. Es es periodo en el que ya no hay hijos en casa, pero todavía no somos abuelos, porque entonces habremos entrado en la novena.

De cada una de estas etapas, obviamente, se pueden sustraer cuantas subetapas se desee, incluso muchas personas pondrían los pasos de unas a otras en otros hitos diferentes.

Lo cierto es que en todas ellas, se percibe la vida, su velocidad, y hasta la manera de ser y estar, de formas muy distintas.

Es un calendario este, más allá de lo biológico, muy marcado por la vida familiar, y social.

Hay otros calendarios, por ejemplo el relativo a nuestra profesión y/o trabajo, pero a mi es este el que más me hace pensar......